Es probable que al querer elegir una cómoda te preguntes como elegir la adecuada. Nuestro primer consejo es que no pienses a la cómoda como un mueble que únicamente puede ir en tu dormitorio. La clave está en pensar primero en lo que estas necesitando, qué te lleva a comprar este tipo de mueble ¿Necesitás guardar sólo ropa? ¿Qué tipo de ropa? ¿En qué sitio irá, hay lugar en el dormitorio? De este modo podés definir si te conviene una cómoda con cajones más grandes o más pequeños.
Las cómodas más altas y angostas son ideales para espacios pequeños para no sobre cargar los pocos metros cuadrados existentes y sirven para colocar un TV, un equipo de música, un cuadro, libros o un sin fin de cosas. Deja volar tu imaginación y pensala como un recibidor, como parte del juego de dormitorio o en cualquier parte de tu casa.
Podés ver esta opción como complemento en un pequeño living.